Parque Rural de Anaga

Carretera TF- 12 Monte de Las Mercedes, Km 6, 38294 San Cristóbal de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife

Como llegar

Anaga ocupa gran parte del macizo situado en el extremo nordeste de la Isla y es probablemente una de nuestras zonas favoritas. A tan solo media hora de Santa Cruz es un plan perfecto tanto para darte un baño en playas salvajes de arena negra volcánica, hacer senderismo entre profundos valles milenarios o comer en algunos caseríos perdidos entre barrancos.

CÓMO LLEGAR
Hay dos accesos diferentes al Parque Rural de Anaga. Puedes entrar por La Laguna o por el pueblo pesquero de San Andrés, a cinco minutos de la capital. Ambas vías se conectan entre ellas. Nosotros te recomendamos subir por un lado y bajar por el otro, para poder ver las dos caras de la cordillera, el espectacular mar de nubes y darte así un paseo en coche por una de las carreteras más impresionantes de Tenerife.



El INTERIOR
Más que hablar de ello, hay que verlo. Es el auténtico paraíso de los senderistas: cientos de vías sumergidas entre plantas prehistóricas y musgo, cascadas y túneles naturales, pasando por miradores de vértigo y una naturaleza salvaje e incontaminada. Hay tantas opciones que solo tienes que elegir la dificultad, el tiempo que quieres estar caminando y ponerte en marcha hasta que te entre hambre. En los diferentes caserío que pueblan el parque hay sitios muy peculiares de comida casera y tradicional, donde almorzar bien y por poco dinero. Tranquilo, nosotros te ayudamos a encontrar esas joyitas escondidas ;-)



EL LITORAL
¡Y a esos preciosos valles y bosques añádele la costa de Anaga! Playas como Benijo o Almáciga, mítica entre los surferos, no dejan indiferentes a nadie. Nosotros solemos avisar que en invierno pierden un poquito de su encanto, debido a las altas mareas, y a la poca arena. Aún así merece muchísimo la pena conocerlas. Puedes hacerlo caminando, ya que hay senderos que recorren la costa, o que desde el interior llegan hasta las playas, o sentado en una terracita tomando pescado fresco y simplemente gozando de las vistas.